Mientras en Chile hay consensos básicos sobre su modelo económico, aquí seguimos expuestos a propuestas radicales que plantean cambiar de modelo económico para retornar al estatismo velasquista con controles de precios, al mismo tiempo que no le reconocen logros económicos al modelo pro mercado en curso desde los noventa. Como si nada hubiera cambiado ni pudiera cambiar en el país.
Por ejemplo, la economía peruana no es una economía de enclaves minero-energé ticos y creciente pobreza. Al 2009, la minería e hidrocarburos contribuyen con 5.7% del producto, mientras la manufactura, construcción y comercio componen 35.5% del producto. Las exportaciones de materias primas son mayores que las industriales, pero eso no cambia el hecho de que la producción industrial y de los sectores no transables orientados al mercado interno supera largamente la del sector minero-energé tico. Importantes países ricos y exitosos, como Noruega, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, tienen economías predominantemente exportadoras de materias primas.
Un reciente pronunciamiento en apoyo a la candidatura antisistema de Humala propone un nuevo "equilibrio" con un país abierto al exterior pero que sabe proteger su mercado nacional. Esto parece un imposible. Un país se abre al mundo o practica el proteccionismo. Cómo pedirle al mundo que nos baje sus aranceles para venderles más productos, y que al mismo tiempo acepte nuestros aranceles altos para evitar la competencia de los productos importados.
También plantean la revisión de los tratados comerciales y retornar a la política proteccionista de la Comunidad Andina.
El tema laboral es un cuello de botella. Los promotores humalistas indican que mientras Chile reconoce los derechos sindicales, el Perú los criminaliza y por eso los salarios chilenos son mucho más altos que los peruanos. No toman en cuenta que Chile hizo una radical reforma laboral hace décadas. En términos del salario bruto, en Chile los costos laborales no salariales equivalen a 29%, y aquí equivalen a 70%. Por eso precisamente los salarios promedio chilenos son más del doble de los salarios promedio peruanos. A mayor protección, menores salarios, con menos empleo y más informalidad. Pero esto resulta contraintuitivo para la izquierda tradicional.
Gonzalo Prialé
enero 28, 2010
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2 comentarios:
Los paises sudamericanos exceptuando a Perú nos llevan ventajas en todo sentido, lamentablemente aqui impera el desacuerdo y las favoritismos politicos, la burocracia y el engaño, hasta que no aprendamos a superar esos problemas seguiremos con los pensamientos retrogradas que invaden a nuestrospensamientos. Fatal
Por el país del Norte (Ecuador) y por el Sur (Chile), nos han sacado una amplia ventaja en todo, solo visiten las fronteras para ver el desarrollo que estas estan experimentando mientras aca en el Perú no pasa nada de nada...dicen "Fronteras Vivas", lo que he visto en mi recorrer es exactamente al revez "Fronteras Muertas,,,,las del Perú"
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