Refieren que tramitación de expedientes es sumamente lento.
Mortificados por la lentitud con la que en la ciudad se resuelven los problemas más urgentes, dirigentes de diversos gremios del transporte – taxistas, mototaxistas y colectivos – demandaron a la autoridad municipal de Chiclayo actúe con rapidez en atender proceso de formalización del servicio público que brindan toda vez que la informalidad agrava su inseguridad.
Cuando se anunciaba desde el año 2009 que el proceso de formalización del servicio del transporte en la Capital de la Amistad iría viento en popa, cuatro años después el desaliento se ha apoderado de sus principales promotores. Los transportistas, aún esperanzados en la palabra del burgomaestre Roberto Torres Gonzáles aguardan que todavía éste pueda cumplir con disponer de todos los medios a su alcance para atender el álgido problema que padece este importante rubro.
Pese a ello, el malestar es cada vez más evidente, pues aun cuando años atrás mostraron toda su predisposición para contribuir a mejorar el servicio a la población, ésta se ha ido desvaneciendo con el tiempo, al punto que se convertiría en su peor enemigo si no hay muestra de emprender acciones urgentes.
En el caso de los mototaxistas, el dirigente de este gremio, Segundo Valdez Cruz, destacó el pasado 18 de julio del 2011 el trabajo emprendido por la Gerencia de Tránsito y Transportes de la Municipalidad de Chiclayo; sin embargo, a la fecha, enero del 2013, se muestra más que desconfiado en que próximamente se pueda concretar el proceso de formalización del servicio público.
El argumento de este descontento radica en que desde la aprobación de la Ordenanza Municipal Nº 014-2012-MPCH, en julio del año pasado, que concretaría este proceso, de las 148 asociaciones de mototaxis que desde hace 12 años prestan servicio en el anillo vial de Chiclayo, solo 12 han sido formalizadas, pese a haber oportunamente alcanzaron el padrón de sus asociados a la Gerencia de Tránsito, con la esperanza que la ordenanza lo haga el resto.
“Si se hubiera agilizado la tramitación de los expedientes presentados desde julio del año pasado, los efectos de esta ordenanza municipal hubieran sido más que positivos, y hubiera permitido formalizar a 4 mil unidades trimóviles agrupadas en asociaciones, de unas 15 mil que actualmente circulan en Chiclayo distrito. Sin embargo, esto no ha ocurrido y podría quedar en un simple ofrecimiento municipal”, expresó Valdez Cruz.
A la fecha, del total de 4 mil mototaxistas por empadronar y a la postre formalizar, aproximadamente 3 mil han cumplido con presentar su expediente a la Gerencia de Tránsito, quizá desmotivados por la pugna interna que desataron Segundo Valdez Cruz y Miguel Guerrero Chuquipul por mantenerse en la secretaría general de este gremio; no obstante ello, no resta responsabilidad a la autoridad edilicia para afrontar el cumplimiento de la ordenanza en toda su extensión.
Según explica Valdez Cruz, la ordenanza municipal Nº 014-2012-MPCH comprendería el otorgamiento de permiso de autorización de paraderos, tarjeta de operatividad y permiso de circulación; sin embargo, todo ello continúa siendo un sueño por alcanzar, frente a un deseo por querer contribuir al orden de Chiclayo.
La molestia en los mototaxistas también se motiva por cuanto cada asociación – 148 en total – en cumplimiento de la establecido en la ordenanza municipal, tuvieron que pagar por derecho de trámite de formalización la suma de 380 soles por un período de seis años, mientras que cada mototaxista que solicitó su formalización procedió a efectivizar el monto de 80 soles por tarjeta de operatividad, pago que anualmente deberá cancelar.
“El cuello de botella está en la Gerencia de Tránsito y Transportes de la comuna chiclayana, donde los expedientes demoran extremadamente en su tramitación; sin embargo, a pesar de los contratiempos surgidos anhelamos que el proceso no se detenga, por el contrario, se agilice, pues a la fecha prestamos un servicio inseguro a la población”, acotó Valdez Cruz.
La ordenanza municipal Nº 014-2012, en todos sus extremos permitirá uniformizar y regular a todos los vehículos formales de la modalidad de mototaxis, por lo que el dirigente de los mototaxistas confía que acabada esta etapa, se proceda a la fiscalización de los vehículos trimóviles en aras de beneficiar al trinomio ciudad-transportista-usuario.
La preocupación por formalizar el servicio para que los mototaxistas puedan prestar un mejor servicio a los usuarios ha motivado a que esta experiencia sea replicada en otros distritos. Así por ejemplo, en José Leonardo Ortiz se espera formalizar a 8 mil vehículos trimóviles, 3 mil en La Victoria y están avanzadas las conversaciones con las autoridades ediles para próximamente emprender este proceso en Pimentel, Pátapo, Monsefú, Olmos y Lambayeque.
“La propuesta permitirá desterrar la informalidad, que fomenta la inseguridad, pues permite que la delincuencia se infiltre en nuestro gremio, razón por la cual sería bueno se reactive el llamado Mototaxi Cívico, lanzado en julio del 2011 y que lastimosamente no ha tenido los resultados esperados pese a los esfuerzos desplegados para que éste se concrete”, acotó Segundo Valdez.
Taxistas afectados
Otro gremio de transportistas afectados también lo son los taxistas, quienes a pesar que en el 2009, con la aprobación de la ordenanza municipal Nº 017-2009-MPCH se proyectó la formalización del servicio público de taxi, poco o nada se ha hecho por beneficiar a los conductores y, por ende, a la ciudad.
Sabido es que en el parque automotor de Lambayeque, los vehículos menores como mototaxis y motos lineales ocupan el mayor número, sobrepasando los 135 mil, seguido de los automóviles como colectivos y taxis que superan los 32 mil unidades; sin embargo, según detalla Segundo García Vásquez, dirigente del Sindicato Único de Taxistas Independientes de Lambayeque – SUTIL – se requiere adoptar medidas urgentes para frenar su crecimiento, y éstas pasan por regular y formalizar el servicio, a través de un efectivo trabajo de la Comisión Técnica.
“A través de esta ordenanza municipal se fijó un plazo para que los técnicos de la comuna chiclayana determinaran el número de vehículos que formarían parte del parque automotor, no obstante ello, nada de esto se ha cumplido, generando que el caos impere en esta ciudad”, puntualiza García Vásquez.
La aplicación de esta ordenanza – refiere – solo ha permitido
“formalizar” entre 3 mil y 3500 taxistas, quienes contradictoriamente no gozan de beneficio alguno, pues en el papel quedó uniformizar que los vehículos que brindan el servicio público de taxi puedan mostrar la identificación del conductor, del vehículo mismo y de la empresa a la que está registrado.
A la postre, asegura, ello a la fecha hubiera fomentado la seguridad en los transportistas, aglutinados en más de 80 empresas que prestan el servicio solo en Chiclayo. Pese a que la ordenanza municipal establecía la formalización, Segundo García Vásquez enfatiza que en compás de espera están otros 43 expedientes, que implica formalizar más de 3200 taxis, sin embargo esto no se da, muy a pesar que fueron ingresados en el 2011 a la Gerencia de Tránsito y Transportes de la comuna chiclayana.
“Lamentablemente el trabajo coordinado logrado en el 2010 no ha sabido mantenerse, menos el alcance de la ordenanza municipal que al final de cuentas fue encarpetada, duerme el sueño de los justos, no se logró la anhelada formalización y la piratería sigue a la orden del día”, enfatiza Segundo Vásquez.
Finalmente, el dirigente atribuye a que el error cometido en la comuna radica en los constantes cambios de funcionarios y personal de la Gerencia de Tránsito y Transportes, lo que ha conllevado al caos este sector, tanto en la documentación, como en el control de los vehículos en las calles. Definitivamente una situación insoportable se presenta, con un parque automotor que llegará a los 300 mil vehículos en Chiclayo, una ciudad donde falta señalización y un verdadero anillo vial.
“Es increíble cómo va aumentando el número de unidades del parque automotor, si comparamos los últimos meses hay un incremento del 50%. En poco tiempo la situación se va a volver insoportable, pues desde el 2011 a la fecha, un aproximado de 80 mil nuevas unidades apareció en el servicio público, la mayoría informales, ocasionando mayor caos y congestión en la ciudad”, sentenció.
● En Chiclayo el servicio de mototaxi no es formal desde el 2002, en que caducaron unos permisos provisionales otorgados en 1999.
● Para Ruperto Míñope, dirigente de la Coordinadora Regional del Transporte Público, elevado número de taxis y mototaxis son principales causantes del caos vehicular en el parque automotor de Chiclayo.
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● En el 2012, la Comisión Especial de Regidores de Tránsito y Transporte de la Comuna estuvo integrada por los regidores Celinda Ortiz Prieto, Víctor Alfaro La Torre y Guido Sánchez Requejo.
● Proceso de formalización de unidades trimóviles permitiría que éstas circulen en un nuevo anillo vial, que comprende las calles y avenidas chiclayanas de Salaverry, Piura, Grau, América, Chinchaysuyo, Fitzcarrald y José Leonardo Ortiz.
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