febrero 08, 2013

MOVIMIENTO CÍVICO FRENTE A PROBLEMÁTICA PROVINCIAL

En histórica sesión del 31 de enero se resolvió luchar por Chiclayo.
La organización institucional como respuesta a la inercia de las autoridades es el mecanismo al que entidades públicas, gremios empresariales, universidades y agrupaciones de la sociedad civil recurren a fin de expresar su rechazo al desgobierno municipal, el caos urbano y la insensibilidad que impera en Chiclayo, asumiendo el compromiso de sentar posiciones firmes que manifiesten el malestar de los vecinos, así como de formular propuestas técnicas y viables que contribuyan a solucionar los problemas de la ciudad.

Autoconvocados a raíz del pronunciamiento dado por el Colegio de Arquitectos de Lambayeque, y reunidos precisamente en la sede de la orden profesional, los representantes de las más importantes instituciones de la región dieron nacimiento al Movimiento Cívico de Chiclayo, organización colectiva sin fines políticos que en adelante servirá de canal para la expresión concertada del sentir ciudadano y el tratamiento técnico – profesional de la situación local.

Tras analizar la inestable situación del gobierno municipal, así como los problemas de limpieza, orden, seguridad y ornato de Chiclayo, los asistentes a la sesión del viernes pasado, dirigida por el decano del Colegio de Arquitectos, Carlos Paredes García; el gerente general de la Cámara de Comercio y Producción de Lambayeque, Lindon Vela Meléndez y el director general de la Universidad César Vallejo – Chiclayo, Raúl Valencia Medina, esquematizaron el plan de acción del colectivo, sustentado en la base de organizaciones plenamente representativas e independientes.

Acciones a desarrollar
Entre las decisiones adoptadas en la asamblea auroral del Movimiento Cívico de Chiclayo, los líderes institucionales aprobaron la formulación de un pronunciamiento público que recoja lo manifestado por la Asamblea de Delegados de la Sociedad Civil – ADOSCIL, el Colegio de Arquitectos y la Cámara de Comercio, incluyendo además la postura firme de exigir al gobierno central y al Tribunal Constitucional pongan fin a la incertidumbre existente en la comuna provincial.

También la realización de una acción cívica que permita concitar la atención nacional por la crisis que atraviesa la ciudad, así como convocar a las escuelas profesionales de Ingeniería de las universidades de la región para conformar un Comité de Vigilancia integrado por especialistas con capacidad de emitir informes periódicos sobre el avance y calidad de las obras municipales, en especial de las de saneamiento que ejecuta en el Centro Histórico el Consorcio Chiclayo.

Otro de los planteamientos más firmes es la intención del solicitar al Poder Ejecutivo, a nombre de la institucionalidad lambayecana, la disolución del actual gobierno municipal e instalación de una junta transitoria, similar a la que asumió el manejo de la comuna en septiembre del 2006, tras el incendio al palacio edil consecuencia del enfrentamiento de poder generado entre los ex alcaldes Arturo Castillo Chirinos y José Barrueto Sánchez.

Reacción ciudadana
El politólogo Jorge Luis Vallejo Castelo, quien acudió en representación de la Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo, explica que la constitución del Movimiento Cívico de Chiclayo es un proceso natural de reacción ciudadana e institucional frente a la coyuntura local, agravada por el inestable ejercicio municipal.

“La ciudadanía tiene que empezar a despertar y darse cuenta que la política no es solamente para quienes están cumpliendo una función de representación, que es temporal además. La política la vivimos todos nosotros y en el día a día y ahora la gente empieza a reclamar porque encuentra una calle en mal estado, basura o inseguridad”, indica.

Vallejo Castelo añade que la consolidación institucional, representada por la participación de organizaciones, gremios y universidades, por ejemplo, sirve como resguardo a la acción política, en este caso de quienes fueron elegidos para gobernar.

“La participación de las instituciones en movimientos como el que se ha formado es bastante positiva, pero también hay que exigir a que cada organización sea transparente en su interior, porque cada una de ellas representa a un colectivo de personas que deben ser coherentes con lo que reclaman y la mejor forma de hacerlo es dando el ejemplo”, señala el académico.

Destaca la participación de los jóvenes que poco a poco se van sumando a las causas colectivas y también tienen presencia en el flamante movimiento, organizados a través de grupos que sin fines políticos han hecho sentir su descontento por la problemática de la ciudad en los últimos meses. “Ha llegado el momento de articularnos, de unir fuerzas, de dejar de hacer cosas de manera independiente y ponernos a trabajar por nuestra ciudad que tanto nos necesita”, enfatiza.

La sociedad civil
Magdalena Santamaría Chimbor, presidenta de ADOSCIL, considera que el nacimiento del movimiento es un paso importante en la participación de las instituciones públicas y privadas de cara al gobierno local, tarea que antes solo cumplían las organizaciones de la sociedad civil.

“A fines del año pasado la Asamblea de Delegados de la Sociedad Civil fijó la firme posición de exhortar al Tribunal Constitucional para que se pronuncie en relación a la inestabilidad de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, acto que hasta el momento no cumple. Asimismo, expresamos nuestra preocupación por la serie de quejas de los vecinos por el lento y deficiente trabajo de renovación de las redes de saneamiento. Las obras son buenas y necesarias, pero el modo en que estas se realizan es malo, por lo que debe darse un cambio inmediato en el proceso. También hemos puesto sobre la mesa la vulnerabilidad sanitaria que presenta la ciudad por la exposición de aguas servidas en la vía pública, por lo que solicitamos la declaratoria de emergencia sanitaria de Chiclayo”, precisa.

La representante de ADOSCIL añade que el pedido no solo está dirigido al gobierno central y al Tribunal Constitucional, también al Poder Judicial, el Ministerio Público, la Contraloría General de la República y al Congreso.

“Tenemos cinco congresistas que hasta ahora no han realizado ninguna acción colectiva frente a los problemas de Chiclayo, dejadez que lamentamos. Por ello saludo y felicito la formación del movimiento cívico, porque la iniciativa que tuvo ADOSCIL en diciembre del año pasado está teniendo continuidad, primero con la acción de los jóvenes, luego con el pronunciamiento de los arquitectos y ahora con el movimiento cívico”, afirma.

Acto memorable
“El 31 de enero queda registrada como una fecha histórica para Lambayeque porque es el día en que nace un movimiento constituido para velar por el desarrollo de Chiclayo y su población, involucrando naturalmente al sistema universitario que nunca más estará de espaldas a la realidad local”, señala por su parte Raúl Valencia Medina, director general de la UCV – Chiclayo.

El académico afirma que corresponde a las casas superiores de estudio tener presencia activa en la elaboración de propuestas y alternativas de cambio, planes de desarrollo y proyectos que generen bienestar a la comunidad, respondiendo de esta forma al rol que la universidad debe cumplir en la sociedad.

“El primer paso lo están dado las universidades César Vallejo, San Martín de Porres, Santo Toribio de Mogrovejo y Particular de Chiclayo al formar parte del conjunto de instituciones que dan nacimiento al movimiento cívico, ejemplo que deben seguir las demás casas superiores y centros de formación profesional, porque el cambio en Chiclayo beneficiará a todos”, añade.

Paralización cívica
Gremios como la Sociedad Nacional de Industrias y la Asociación Regional de Exportadores también participan del movimiento cívico, demostrando la voluntad del empresariado regional de trabajar por el bien de la provincia.

Precisamente el sector empresarial, representado por la Cámara de Comercio y Producción de Lambayeque – CCPL, propone la realización de un paro provincial, que abarque también al sector transportes, para hacer sentir el rechazo de la colectividad a la falta de planificación con la que se dirige Chiclayo.

“En sesión de directorio de la Cámara de Comercio se aprobó por unanimidad convocar a un paro cívico provincial que nos permita expresar nuestra incomodidad y preocupación por el desgobierno y las obras mal ejecutadas en Chiclayo, propuesta que hacemos extensiva a las demás organizaciones y que con el movimiento cívico se espera llegar a concretar”, explica Lindon Vela Meléndez, gerente general de la centenaria institución.

“Los empresarios están dispuestos a sacrificar un día de sus ventas, a cerrar sus negocios, para demostrar que la situación de Chiclayo se ha tornado intolerable. Los malos trabajos en la obra de saneamiento, por ejemplo, están causando cuantiosas pérdidas debido al cierre de calles, aniegos y lentitud en las obras físicas, problemática que evidentemente se ha salido del control de nuestras autoridades locales, hoy más preocupadas en su permanencia en el cargo que en el progreso y tranquilidad de los ciudadanos”, añade.

Vela Meléndez precisa también que se está pensando en la organización de una gran marcha y un plantón en el Parque Principal, así como de otro tipo de intervenciones cívicas para despertar el interés de los vecinos en sumarse a la causa del movimiento.

“No perseguimos otro propósito que no sea el bienestar común y que Chiclayo recupere la tranquilidad y el brillo que antes tuvo, el movimiento es un espacio democrático que dista de los intereses político-partidarios y busca reafirmar la participación ciudadana. No podemos seguir tolerando una situación de ingobernabilidad que nos resta competitividad como zona comercial, oportunidades de desarrollo e inversión”, precisa.

A su turno, el decano del Colegio de Arquitectos de Lambayeque, Carlos Paredes García, considera que las demás órdenes profesionales también deben pronunciarse sobre lo que sucede en la ciudad e integrarse al Movimiento Cívico de Chiclayo, en razón de ser este un espacio meramente institucional.

“Reconforta saber que no estamos solos y que muchas instituciones y organizaciones sociales, así como empresas piensan como nosotros y tienen la misma preocupación por Chiclayo. Como colegio profesional deseamos lo mejor para la ciudad que nos cobija y ese deseo lo manifestamos poniéndonos al servicio de la autoridad local para juntos buscar vías de solución a los problemas que hoy, además de agobiarnos nos avergüenzan frente a quienes nos visitan”, expresa.

+ NOTICIAS
Organizaciones que dan nacimiento al Movimiento Cívico de Chiclayo:
Cámara de Comercio y Producción de Lambayeque
Colegio de Arquitectos del Perú – Regional Lambayeque
Universidad César Vallejo – Chiclayo
Universidad de San Martín de Porres – Filial Norte
Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo
Universidad de Chiclayo
Asociación Regional de Exportadores
Sociedad Nacional de Industrias – Lambayeque
Gobierno Regional de Lambayeque
Mesa de Concertación Contra la Violencia
Grupo Expresión
Programa Llachay
ACYULAM
ADOSCIL
Defensoría del Pueblo
Asociación de Personas con Discapacidad “Jorge Gastelo Vallejo”
Sindicado de Enfermeras de EsSALUD
Asociación de Mujeres Líderes
Colectivo Chiclayano Despierta
Colectivo Justicia Anticorrupción
Semanario Expresión

1 comentario:

Anónimo dijo...

Chiclayo sufre actualmente de una crisis emocional por parte de las Autoridades que fueron elegidas, NO HAY CALIDAD MORAL, LOS VALORES ESTÁN POR LO SUELOS, ES POR ESO QUE CHICLAYO ESTA COMO ESTA.

LAS AUTORIDADES ENTRAN A COIMIAR....Y ESTO ES LAMENTABLE, Y LOS RESULTADO SE VEN A A LUZ...Y EL SINVERGUENZA DE torres gonsales acusa que es un movimiento politico.... y como miercoles entendera que la Ciudad de Chiclayo esta un desastre, obras mal hechas, cartas fianzas falsas, exceso de personal, impuestos municipales los cobran sin ningún criterio técnico,y todavía quiere que lo aplaudan.....que tan caradura,,,,quienes serán sus asesores......en fin...